“Todas las cosas me fueron entregadas por mi Padre; nadie conoce al Hijo, sino el Padre, ni al Padre conoce alguno, sino el Hijo, aquel a quien el Hijo lo quiera revelar”
— Mateo 11:27
“Para que así como el pecado reinó para muerte, así también la gracia reine por la justicia para vida eterna mediante Jesucristo, Señor nuestro”
— Romanos 5:21
“Pero cuando venga el Espíritu de verdad, él os guiará a toda la verdad; porque no hablará por su propia cuenta, sino que hablará todo lo que oyere, os hará saber las cosas que habrán de venir”
— Juan 16:13
“Matasteis al Autor de la vida, a quien Dios ha resucitado de los muertos, de lo cual nosotros somos testigos”
— Hechos 3:15
“El que en él cree, no es condenado; pero el que no cree, ya ha sido condenado, porque no ha creído en el nombre del unigénito Hijo de Dios”
— Juan 3:18
“Entonces vi el cielo abierto; he aquí un caballo blanco, el que lo montaba se llamaba Fiel Verdadero, con justicia juzga pelea”
— Apocalipsis 19:11
“Hijitos míos, no amemos de palabra ni de lengua, sino de hecho en verdad”
— 1 Juan 3:18
“Después me mostró un río limpio de agua de vida, resplandeciente como cristal, que salía del trono de Dios del Cordero”
— Apocalipsis 22:1
“Respondió Jesús le dijo: De cierto, de cierto te digo, que el que no naciere de nuevo, no puede ver el reino de Dios”
— Juan 3:3
“Todo lo cual es sombra de lo que ha de venir; pero el cuerpo es de Cristo”
— Colosenses 2:17
“Por quien también tenemos entrada por la fe a esta gracia en la cual estamos firmes, nos gloriamos en la esperanza de la gloria de Dios”
— Romanos 5:2
“Los labios mentirosos son abominación a JehováPero los que hacen verdad son su contentamiento”
— Proverbios 12:22
“Aquel Verbo fue hecho carne, habitó entre nosotros (vimos su gloria, gloria como del unigénito del Padre), lleno de gracia de verdad”
— Juan 1:14
“No se turbe vuestro corazón; creéis en Dios, creed también en mí”
— Juan 14:1
“Si me conocieseis, también a mi Padre conoceríais; desde ahora le conocéis, le habéis visto”
— Juan 14:7
“Porque también Cristo padeció una sola vez por los pecados, el justo por los injustos, para llevarnos a Dios, siendo a la verdad muerto en la carne, pero vivificado en espíritu”
— 1 Pedro 3:18
“Porque por medio de él los unos los otros tenemos entrada por un mismo Espíritu al Padre”
— Efesios 2:18
“Le respondió Simón Pedro: Señor, ¿a quién iremos? Tú tienes palabras de vida eterna”
— Juan 6:68
“Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de qué avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad”
— 2 Timoteo 2:15
“Yo soy el pan vivo que descendió del cielo; si alguno comiere de este pan, vivirá para siempre; el pan que yo daré es mi carne, la cual yo daré por la vida del mundo”
— Juan 6:51
“Por los reyes por todos los que están en eminencia, para que vivamos quieta reposadamente en toda piedad honestidad”
— 1 Timoteo 2:2
“Todavía un poco, el mundo no me verá más; pero vosotros me veréis; porque yo vivo, vosotros también viviréis”
— Juan 14:19
“En la casa de mi Padre muchas moradas hay; si así no fuera, yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a preparar lugar para vosotros”
— Juan 14:2
“Si me fuere os preparare lugar, vendré otra vez, os tomaré a mí mismo, para que donde yo estoy, vosotros también estéis”
— Juan 14:3
“Con toda humildad mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor”
— Efesios 4:2
“Mediante el cual creéis en Dios, quien le resucitó de los muertos le ha dado gloria, para que vuestra fe esperanza sean en Dios”
— 1 Pedro 1:21
“Volvió, pues, Jesús a decirles: De cierto, de cierto os digo: Yo soy la puerta de las ovejas”
— Juan 10:7
“Escogí el camino de la verdadHe puesto tus juicios delante de mí”
— Salmos 119:30
“Yo soy la puerta; el que por mí entrare, será salvo; entrará, saldrá, hallará pastos”
— Juan 10:9
“Porque el pan de Dios es aquel que descendió del cielo da vida al mundo”
— Juan 6:33
“Escribe al ángel de la iglesia en Filadelfia: Esto dice el Santo, el Verdadero, el que tiene la llave de David, el que abre ninguno cierra, cierra ninguno abre”
— Apocalipsis 3:7
“El que ama su vida, la perderá; el que aborrece su vida en este mundo, para vida eterna la guardará”
— Juan 12:25
“Encamíname en tu verdad, enséñamePorque tú eres el Dios de mi salvaciónEn ti he esperado todo el día”
— Salmos 25:5
“Para ser ministro de Jesucristo a los gentiles, ministrando el evangelio de Dios, para que los gentiles le sean ofrenda agradable, santificada por el Espíritu Santo”
— Romanos 15:16
“Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuera, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré”
— Juan 16:7
“Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, la verdad no está en nosotros”
— 1 Juan 1:8
“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”
— Juan 3:16
“Jesús le dijo: Yo soy el camino, la verdad, la vida; nadie viene al Padre, sino por mí”
— Juan 14:6
“Él, de su voluntad, nos hizo nacer por la palabra de verdad, para que seamos primicias de sus criaturas”
— Santiago 1:18
“Yo les doy vida eterna; no perecerán jamás, ni nadie las arrebatará de mi mano”
— Juan 10:28
“Pues la ley por medio de Moisés fue dada, pero la gracia la verdad vinieron por medio de Jesucristo”
— Juan 1:17
“Yo soy la vid verdadera, mi Padre es el labrador”
— Juan 15:1
“Le dijo entonces Pilato: ¿Luego, eres tú rey? Respondió Jesús: Tú dices que yo soy rey. Yo para esto he nacido, para esto he venido al mundo, para dar testimonio a la verdad. Todo aquel que es de la verdad, oye mi voz”
— Juan 18:37
“Como le has dado potestad sobre toda carne, para que dé vida eterna a todos los que le diste”
— Juan 17:2
“Le dijo Jesús: Yo soy la resurrección la vida; el que cree en mí, aunque esté muerto, vivirá”
— Juan 11:25
“Pero sabemos que el Hijo de Dios ha venido, nos ha dado entendimiento para conocer al que es verdadero; estamos en el verdadero, en su Hijo Jesucristo. Este es el verdadero Dios, la vida eterna”
— 1 Juan 5:20
“Conoceréis la verdad, la verdad os hará libres”
— Juan 8:32
“Porque en él habita corporalmente toda la plenitud de la Deidad”
— Colosenses 2:9
“De cierto, de cierto os digo, que el que guarda mi palabra, nunca verá muerte”
— Juan 8:51
“El Espíritu la Esposa dicen: Ven. el que oye, diga: Ven. el que tiene sed, venga; el que quiera, tome del agua de la vida gratuitamente”
— Apocalipsis 22:17
“Dios es Espíritu; los que le adoran, en espíritu en verdad es necesario que adoren”
— Juan 4:24
“Si decimos que tenemos comunión con él, andamos en tinieblas, mentimos, no practicamos la verdad”
— 1 Juan 1:6
“De Jesucristo el testigo fiel, el primogénito de los muertos, el soberano de los reyes de la tierra. Al que nos amó, nos lavó de nuestros pecados con su sangre”
— Apocalipsis 1:5
“Por el camino nuevo vivo que él nos abrió a través del velo, esto es, de su carne”
— Hebreos 10:20
“Como me envió el Padre viviente, yo vivo por el Padre, asimismo el que me come, él también vivirá por mí”
— Juan 6:57
“Vosotros sois de vuestro padre el diablo, los deseos de vuestro padre queréis hacer. Él ha sido homicida desde el principio, no ha permanecido en la verdad, porque no hay verdad en él. Cuando habla mentira, de suyo habla; porque es mentiroso, padre de mentira”
— Juan 8:44
“Santifícalos en tu verdad; tu palabra es verdad”
— Juan 17:17
“Dando el Espíritu Santo a entender con esto que aún no se había manifestado el camino al Lugar Santísimo, entre tanto que la primera parte del tabernáculo estuviese en pie”
— Hebreos 9:8
“Cuando Cristo, vuestra vida, se manifieste, entonces vosotros también seréis manifestados con él en gloria”
— Colosenses 3:4
“Escribe al ángel de la iglesia en Laodicea: He aquí el Amén, el testigo fiel verdadero, el principio de la creación de Dios, dice esto”
— Apocalipsis 3:14
“La revelación de Jesucristo, que Dios le dio, para manifestar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto; la declaró enviándola por medio de su ángel a su siervo Juan”
— Apocalipsis 1:1
“Le pidió cartas para las sinagogas de Damasco, a fin de que si hallase algunos hombres o mujeres de este Camino, los trajese presos a Jerusalén”
— Hechos 9:2
“Pero cuando venga el Consolador, a quien yo os enviaré del Padre, el Espíritu de verdad, el cual procede del Padre, él dará testimonio acerca de mí”
— Juan 15:26
“Nosotros somos de Dios; el que conoce a Dios, nos oye; el que no es de Dios, no nos oye. En esto conocemos el espíritu de verdad el espíritu de error”
— 1 Juan 4:6
“Todo aquel que niega al Hijo, tampoco tiene al Padre. El que confiesa al Hijo, tiene también al Padre”
— 1 Juan 2:23
“En él estaba la vida, la vida era la luz de los hombres”
— Juan 1:4
“Este es Jesucristo, que vino mediante agua sangre; no mediante agua solamente, sino mediante agua sangre. el Espíritu es el que da testimonio; porque el Espíritu es la verdad”
— 1 Juan 5:6
“Enséñame, oh Jehová, tu camino; caminaré yo en tu verdadAfirma mi corazón para que tema tu nombre”
— Salmos 86:11
“El que no se halló inscrito en el libro de la vida fue lanzado al lago de fuego”
— Apocalipsis 20:15
“Os expulsarán de las sinagogas; aun viene la hora cuando cualquiera que os mate, pensará que rinde servicio a Dios”
— Juan 16:2
“En ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos”
— Hechos 4:12
“Porque hay un solo Dios, un solo mediador entre Dios los hombres, Jesucristo hombre”
— 1 Timoteo 2:5
“Así también está escrito: Fue hecho el primer hombre Adán alma viviente; el postrer Adán, espíritu vivificante”
— 1 Corintios 15:45
“Sino que siguiendo la verdad en amor, crezcamos en todo en aquel que es la cabeza, esto es, Cristo”
— Efesios 4:15
“Pero esto te confieso, que según el Camino que ellos llaman herejía, así sirvo al Dios de mis padres, creyendo todas las cosas que en la ley en los profetas están escritas”
— Hechos 24:14
“Acercándoos a él, piedra viva, desechada ciertamente por los hombres, mas para Dios escogida preciosa”
— 1 Pedro 2:4
“Por lo cual puede también salvar perpetuamente a los que por él se acercan a Dios, viviendo siempre para interceder por ellos”
— Hebreos 7:25
“Porque como el Padre levanta a los muertos, les da vida, así también el Hijo a los que quiere da vida”
— Juan 5:21