“No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará también juntamente con la tentación la salida, para que podáis soportar”
— 1 Corintios 10:13
“El justo sirve de guía a su prójimoMas el camino de los impíos les hace errar”
— Proverbios 12:26
“Porque donde hay celos contención, allí hay perturbación toda obra perversa”
— Santiago 3:16
“Antes exhortaos los unos a los otros cada día, entre tanto que se dice: Hoy; para que ninguno de vosotros se endurezca por el engaño del pecado”
— Hebreos 3:13
“La revelación de Jesucristo, que Dios le dio, para manifestar a sus siervos las cosas que deben suceder pronto; la declaró enviándola por medio de su ángel a su siervo Juan”
— Apocalipsis 1:1
“Bienaventurados los que lavan sus ropas, para tener derecho al árbol de la vida, para entrar por las puertas en la ciudad”
— Apocalipsis 22:14
“Tres amigos de Job, Elifaz temanita, Bildad suhita, Zofar naamatita, luego que oyeron todo este mal que le había sobrevenido, vinieron cada uno de su lugar; porque habían convenido en venir juntos para condolerse de él para consolarle”
— Job 2:11
“Bendecid a los que os maldicen, orad por los que os calumnian”
— Lucas 6:28
“Si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente sin reproche, le será dada”
— Santiago 1:5
“Huid de la fornicación. Cualquier otro pecado que el hombre cometa, está fuera del cuerpo; mas el que fornica, contra su propio cuerpo peca”
— 1 Corintios 6:18
“Si alguno se cree religioso entre vosotros, no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana”
— Santiago 1:26
“El hombre perverso levanta contiendaY el chismoso aparta a los mejores amigos”
— Proverbios 16:28
“No deis lo santo a los perros, ni echéis vuestras perlas delante de los cerdos, no sea que las pisoteen, se vuelvan os despedacen”
— Mateo 7:6
“No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable perfecta”
— Romanos 12:2
“Fieles son las heridas del que amaPero importunos los besos del que aborrece”
— Proverbios 27:6
“Teniendo la gloria de Dios. su fulgor era semejante al de una piedra preciosísima, como piedra de jaspe, diáfana como el cristal”
— Apocalipsis 21:11
“Porque nada hay imposible para Dios”
— Lucas 1:37
“Porque si alguno no provee para los suyos, mayormente para los de su casa, ha negado la fe, es peor que un incrédulo”
— 1 Timoteo 5:8
“No participéis en las obras infructuosas de las tinieblas, sino más bien reprendedlas”
— Efesios 5:11
“En todo tiempo ama el amigoY es como un hermano en tiempo de angustia”
— Proverbios 17:17
“Así que vosotros, oh amados, sabiéndolo de antemano, guardaos, no sea que arrastrados por el error de los inicuos, caigáis de vuestra firmeza”
— 2 Pedro 3:17
“El que anda con sabios, sabio seráMas el que se junta con necios será quebrantado”
— Proverbios 13:20
“Lo cual también hablamos, no con palabras enseñadas por sabiduría humana, sino con las que enseña el Espíritu, acomodando lo espiritual a lo espiritual”
— 1 Corintios 2:13
“Jesús le dijo: ¿Tanto tiempo hace que estoy con vosotros, no me has conocido, Felipe? El que me ha visto a mí, ha visto al Padre; ¿cómo, pues, dices tú: Muéstranos el Padre?”
— Juan 14:9
“No os unáis en yugo desigual con los incrédulos; porque ¿qué compañerismo tiene la justicia con la injusticia? ¿qué comunión la luz con las tinieblas?”
— 2 Corintios 6:14
“Amaos los unos a los otros con amor fraternal; en cuanto a honra, prefiriéndoos los unos a los otros”
— Romanos 12:10
“Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado a su Hijo unigénito, para que todo aquel que en él cree, no se pierda, mas tenga vida eterna”
— Juan 3:16
“No devolviendo mal por mal, ni maldición por maldición, sino por el contrario, bendiciendo, sabiendo que fuisteis llamados para que heredaseis bendición”
— 1 Pedro 3:9
“Bienaventurado el varón que no anduvo en consejo de malosNi estuvo en camino de pecadoresNi en silla de escarnecedores se ha sentado”
— Salmos 1:1
“El hombre que tiene amigos ha de mostrarse amigoY amigo hay más unido que un hermano”
— Proverbios 18:24
“Mirad por vosotros mismos. Si tu hermano pecare contra ti, repréndele; si se arrepintiere, perdónale”
— Lucas 17:3
“Someteos, pues, a Dios; resistid al diablo, huirá de vosotros”
— Santiago 4:7
“No te entremetas con el iracundoNi te acompañes con el hombre de enojos”
— Proverbios 22:24
“¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan con varones”
— 1 Corintios 6:9
“Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, orad por los que os ultrajan os persiguen”
— Mateo 5:44
“Cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas”
— Marcos 11:25
“Por tanto, si tu hermano peca contra ti, ve repréndele estando tú él solos; si te oyere, has ganado a tu hermano”
— Mateo 18:15
“De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas nuevas”
— 2 Corintios 5:17
“Un Dios Padre de todos, el cual es sobre todos, por todos, en todos”
— Efesios 4:6
“El que anda en chismes descubre el secretoNo te entremetas, pues, con el suelto de lengua”
— Proverbios 20:19
“Así que, todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esto es la ley los profetas”
— Mateo 7:12
“Más bien os escribí que no os juntéis con ninguno que, llamándose hermano, fuere fornicario, o avaro, o idólatra, o maldiciente, o borracho, o ladrón; con el tal ni aun comáis”
— 1 Corintios 5:11
“No erréis; las malas conversaciones corrompen las buenas costumbres”
— 1 Corintios 15:33
“El que cubre la falta busca amistadMas el que la divulga, aparta al amigo”
— Proverbios 17:9
“Mas tenga la paciencia su obra completa, para que seáis perfectos cabales, sin que os falte cosa alguna”
— Santiago 1:4